"Una luz en el hampa" de Samuel Fuller
Por la gran manía que hay en este bendito país a "rebautizar" algunas películas a través del título, nos encontramos con uno de esos casos en los que este puede dar lugar a equívoco, haber hecho una traducción literal del título (The naked kiss - el beso desnudo) hubiera traído problemas ante la censura, de eso estoy completamente seguro, pero es que nos ha costado unos cuantos años entender que las cosas son como son y no como a unos cuantos les parecen.
Mordacidad y crítica personal de un lado, nos adentramos en este trabajo del gran Fuller en el que no podemos hablar demasiado del hampa porque realmente tan solo se menciona en el film, no llega siquiera a aparecer como entidad, si que podemos comentar las actitudes de la señorita Kelly (Constance Towers) la cual mantiene ciertos hábitos hacia los hombres que frecuentan los lugares donde ella trabaja y tiene el hábito de cobrarles por dispersarles o bien placeres, o bien favores o ambas cosas a la vez.
La vida ha sido dura para una mujer realmente bella en la que el paso del rostro ha ido dejando huella en tan traído y llevado cuerpo, por tanto decide ampliar miras y probar fortuna lejos de la gran ciudad, donde habitualmente tan solo encuentra problemas, este viaje hace que nuestro personaje principal se desdoble, de repente nos encontramos que detrás de esa fachada de mujer de la calle está la de una madre dedicada y comprensiva con todos los que la rodean, una persona en definitiva comprometida y consciente de los problemas de los demás.
Pero nada es fácil, el pasado siempre es traidor, acaba visitando el presente tarde o temprano y siempre que lo hace no resulta demasiado halagüeño, Kelly, no iba a a ser distinta al resto de los mortales, aunque se haya convertido en una nueva persona con derecho a dejar detrás de si todo lo que no desea, la cosa no va a ser fácil y tendrá que pasar su prueba de fuego tanto en el plano social, como en el plano personal, en ambos casos al realizador le sirve para hacer crítica de la sociedad de una forma bastante incisiva, queriendo dar a entender que ningún tipo de comunidad está libre de ello, ni siquiera las personas en si por muy altos estamentos que ocupen.
Muy curiosa la rotunda manera de comenzar el film con Kelly bolso en mano golpeando a un hombre y rodando la escena con la técnica de cámara al hombro, incluso cuando este le quita la peluca que lleva puesta, haciendo que ella se traslade a un espejo para volvérsela a poner y acicalarse, lo que sirve de excusa para mostrarnos los títulos de crédito al mismo tiempo que vemos como nuestra protagonista se recompone de la lucha.
TRONCHA
1 comentario:
Hola, me parecen muy interesantes tus textos, te pongo un enlace.
Saludos!
Publicar un comentario