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miércoles, 30 de mayo de 2007

"Offside" de Jafar Panahi

A veces es sorprendente la brecha abismal que puede existir entre una película y otra, y cuando digo esto me refiero a todos sus aspectos, al apartado técnico, al de promoción, al de interpretación, todos en general, y por supuesto el económico, presupuestos grandilocuentes para hacer filmes que son totalmente lineales y que no gozan de ningún merito a la hora de realizarlos, grandes cantidades de dinero invertidos en comprar derechos de autor de algún libro o guión excepcional, para que todo quede en algo que roza la mediocridad.

Offside es un largometraje normal y corriente, sin esas grandes miras, todo lo contrario, es un cine cercano que en ocasiones parece tan sencillo como que nosotros mismos cámara al hombro podríamos hacerlo, en definitiva un cine muy natural, para nada lleno de sobresaltos y llevando a gala su principal objetivo que es el de la reivindicación del papel de la mujer, pero sobre todo en el ámbito islámico, en concreto en este caso, la mujer iraní.

El enfoque me parece valiente, y sobre todo sus protagonistas ya que estamos hablando de una sociedad tan férrea como la que fijan los ayatolá en ese país, las jóvenes estudiantes empiezan a plantearse algunos conceptos sobre la vida que les toca vivir, es como si dicha generación se erigiera en la punta de lanza del cambio que algún dia debería llegar, y la excusa que el realizador Jafar Panahi busca como base narrativa un partido de fútbol de la selección nacional.

Los diálogos utilizados son muy diestros, en ellos la voz cantante la lleva el mal denominado sexo débil, el cual esgrime una cantidad increíble de argumentos que ninguno de los hombres encargados de su vigilancia, son capaces de rebatir, incluso llegan a quedar mentalmente más arrinconados que lo que lo están ellas durante el arresto. Aun siendo un tema complejo y por supuesto delicado, la obra goza de tintes cómicos de gran inteligencia que logran arrancar la sonrisa del espectador.

Volviendo a la idea general que me produce este largometraje sencillo que goza de una calidad bastante más que aceptable, las interpretaciones son también sencillas y grandes alardes, el director se centra más en mostrarnos la situación que en dotarle de fuerza interpretativa, lo que si pienso, es que el film tiene cierto carácter documental, y de ahí que la visión global que se nos ofrece no sea real del todo, aun siendo el efecto final del trabajo, bastante satisfactorio pienso que se podría haber hurgado más en la herida para de alguna manera sacar más jugo.

Otra sensación muy grande que me quedó al verla fue que aun basando la historia en un día de fútbol, el director no entendía mucho de dicho deporte, aun así creo recordar que en todo el metraje solo sale una escena de jugadores en el campo.

TRONCHA

lunes, 28 de mayo de 2007

"Black line" de Teruo Ishii

Primera de mis incursiones en el cine de este director, y por supuesto que prometo que no va a ser la última, la verdad es que después de visualizar esta película me quedó un regusto muy bueno, y después pasándola al análisis por mi cabeza fue cobrando mayor interés a la hora de su análisis, volviendo a insistir una vez más en la cantidad de joyas que la gente que le gusta el cine se pierde, simplemente por el prejuicio que tienen ante el cine oriental en general.

La obra es de cine negro puro y duro, y no se crean que tiene mucho que envidiar a su hermano mayor, al que en aquella misma época y años anteriores se estaba haciendo en EE.UU. semejante a ese cine de gángsters y de clubes nocturnos, de números musicales de chicas con la ropa justa, un mundo de drogadicción y prostitución, por supuesto todo ello extrapolado a un punto de vista más oriental y con la presencia de la yakuza.

Esta visión que nos ofrece el director me parece una crítica contra la sociedad yanqui, recordemos que Japón fue uno de los perdedores de la guerra y que los americanos ejercieron el control en dicho país durante la posguerra, dejándoles sus peores vicios y costumbres a la sociedad nipona, por supuesto que hay gente que podría opinar totalmente al contrario, eso ya depende de cada uno de nosotros. Sirva como ejemplo también el cine de Seijun Suzuki, en los que refleja todavía mucho más explícitamente esta realidad, aunque al contrario que Ishii, su cine sea muchísimo más colorista, curioso contraste digno de estudiar.

No quiero pensar que mi devoción personal por el cine de Melville , me haga ver siempre influencias de este gran director en cualquier obra de cine negro, en este caso podemos asegurar que hay ciertos trazos, como son la clase y caballerosidad del protagonista Maguchi (Shigeru Amachi), la rotundidad a la hora de abordar al sexo contrario por supuesto sin llegar al maltrato, en general es ese cine oscuro, de señores en gabardina que tanto me recuerda a la nouvelle vague.

En resumen ha sido un hallazgo total el cine de este realizador japonés, del que recomiendo a todos que se adentren y experimente con él, les aseguro que si les gusta el cine negro, no van a echar nada de menos, bueno quizás una cosa de la que adolece es su metraje, en tan solo 80 minutos, quizás condensa demasiado la trama y por eso en algunos momentos la acción es excesivamente precipitada viniéndose encima a modo de avalancha.

TRONCHA

viernes, 25 de mayo de 2007

"Cinderella" de James Kirkwood

Curiosa obra de cine de principios de siglo, de los primeros años del cine, basada en el celebre cuento de Charles Perrault, con una jovencísima Mary Pickford en el papel protagonista de la Cenicienta, por supuesto que no es necesario contar de que va la película y de que estamos hablando de una historia para niños, pero se me antoja bastante ramplona en su conjunto, explico a continuación porque.

En primer lugar el papel del príncipe (Owen Moore) es simple a más no poder, como diría un amigo mío el actor está completamente acartonado, su interpretación es patética sinceramente, por supuesto salvando las distancias entre la forma de actuar de aquella época en el cine mudo y la actual, pero desgraciadamente el que en aquellos momentos era en la vida real, marido de la Pickford, se cubrió de gloria con el papel.

Básicamente la película está dirigida a mostrar una serie de efectos visuales que por supuesto para aquella época eran avances muy novedosos, y esto acaba por descuidar la historia en si, de entre toda esta amalgama de secuencias de efectos destaco sobre todas la del reloj, durante el sueño de Cenicienta, en la que aparecen dos enanos a modo de jaquemart, la distorsión de la esfera del reloj recuerda a una de las escenas de la posterior Metrópolis (1927) de Fritz Lang.

En la obra se aprecia un humor muy básico, demasiado infantil en mi opinión, el hada madrina la pobre tiene una expresividad mínima, es como un libro hay que leer en su rostro, no nos dice nada, las caracterizaciones de los personajes no son ni de lejos de lo mas exquisito, en fin, por encima de todo esto destaca una natural y cercana Mary Pickford, que es lo que hace de cierto interés este trabajo.

Solo una cuestión más, si todo lo que “poseía” Cenicienta dejaría de existir justo con las campanadas de medianoche, porque aquel zapato de cristal quedó intacto y no se evaporó, como lo hicieron la carroza, los pajes y el vestido… Nunca se lo habían preguntado…

TRONCHA

miércoles, 23 de mayo de 2007

"Cabeza borradora" de David Lynch

Bueno lo mió con este director es una relación complicada, algo que definiría de alguna manera algunas de su películas, complicadas, me exige mucho acaba agotándome mentalmente, me explico, intento comprender el significado de sus filmaciones más extrañas y al final siempre acaba derrotándome, me reconozco vencido, no logro encontrarles una explicación lógica, y de alguna manera esto me indigna, me enfada conmigo mismo, estoy seguro que uno que yo me se cuando lea estas líneas esbozará una sonrisa en su rostro.

Pues bien he tomado una determinación, después de mucho meditarlo, claro está no podía ser de otra manera tratándose del especial realizador americano, he decidió darle explicación a lo que veo, no voy a darle más vueltas porque estoy seguro que tarde o temprano don David Lynch va a acabar conmigo, como no ponga remedio a esta situación, y mientras el sujeto al que me refería en el párrafo anterior seguirá sosteniendo su mueca de sorna según continua leyendo.

Este risueño personaje, enigmático, observador, espectador de mis palabras y lector de estas líneas podría perfectamente formar parte de la nómina de personajes de las misteriosas películas de este realizador, esos personajes que aparecen de repente, que logran crearnos una gran zozobra y que de alguna manera logran quedarse para siempre en nuestras mentes, ejemplos claros los hay en Carretera perdída (1997) e Inland Empire (2006), que son las dos que ahora mismo se me vienen a la cabeza.

Hay que reconocer que este director provoca pasiones y odios de igual manera, y aun así ha seguido manteniéndose fiel a esta forma de hacer cine en bastantes de sus obras, admito su gran originalidad y por supuesto pienso que es un maestro a la hora de crear atmósferas, su calidad de genio le permite jugar con las sensaciones del espectador, esa machacona y constante música industrial y el radiador de la habitación son muestras claras de este clímax de tensión que solo el sabe generar, el que pasemos miedo atravesando un angosto pasillo de nuestra propia casa o preguntándonos que puede haber detrás de unas simples cortinas.

Todo en Lynch es abstracto no nos da ninguna tregua, y para simplificar, ya que me he hecho la promesa que anteriormente relataba, pienso que en esta obra estamos ante una historia de ciencia ficción en la que Henry (Jack Nance) ha sido abducido por seres de otro mundo y su semilla ha sido depositada en Mary (Charlotte Stewart) todo esto desencadenará una serie de secuencias y consecuencias en las que el director se moverá como pez en el agua, adelante den rienda suelta a su imaginación y ya pueden situarse delante de la pantalla a gozar del enigmático universo de Lynch.

TRONCHA

lunes, 21 de mayo de 2007

"Motivo de alarma" de Eric Ambler

Hasta hace poco para mi era un autor desconocido. He tenido alguna vez en mis manos, en librerías de viejo, su más famosa novela, al menos en castellano tiene muchísimas ediciones, "La Máscara de Dimitrios". Pero no fue hasta hace poco tiempo que me animé a leerla. Y lo que me estaba perdiendo... Ambler es un maestro, sus novelas, al menos las que he leído hasta ahora tienen entre 60 y 70 años, pero tienen una frescura y unas dosis de intriga que te dejan sin aliento. A mi personalmente me gusta la novela negra de detectives, sobre todo Hard Boiled, dura durísima, el genero de espías no es de mis favoritos. Pero me rindo absolutamente ante Ambler. Primero leí la historia de Dimitrios y es excepcional y ahora ha sido “Motivo de Alarma”.

Hay que destacar el estilo del autor, aparentemente muy sencillo y que lleva a la engañosa sensación de que es simple. Pero nada más diferente de la realidad. Ambler consigue trasmitir una sensación de angustia poderosísima en los momentos de tensión. En cambio, en los diálogos entre espías nos hace ver dobles sentidos y sensación de complicidad absoluta. Las descripciones de los personajes y sus expresiones nos hacen ver, cinematográficamente incluso, los caracteres de los tipos más extraños del mundo, los espías. Todo lo anterior mezclado con una trama que funciona como un mecanismo de relojería hace que la historia narrada en “Motivo de Alarma” sea totalmente inmersiva y se lea de un tirón.

La historia tiene como protagonista a Nicky Marlow, ingeniero en paro, que se ve obligado a ir a Italia para conseguir un trabajo donde se mezcla con una conspiración donde tienen su protagonismo la Mafia, la OVRA (Organizzacione di Vigilanza e Repressione dell'Antifascismo, es decir la Gestapo a la Italiana made in Mussolini), los Nazis, Espías Soviéticos, etc. La historia se desarrolla en el tiempo justo anterior a la segunda guerra mundial y creo que revela claves muy interesantes de la relación entre el régimen de Hitler y el de Mussolini. Aunque ahora que escribo esto, me pregunto si serán reales.

No quiero desvelar nada de la trama, dado que el misterio es fundamental para disfrutarla, pero señalar que hay pasajes de infarto en la novela.

Un artículo muy interesante:

http://www.elmundo.es/1998/10/29/opinion/29N0022.html


DES

viernes, 18 de mayo de 2007

"La chute de la maison Usher" (La caida de la casa Usher) de Jean Epstein

Sumo respeto ante el cine mudo, ante los albores del cine de nuestros dias, ante lo trabajoso de los filmes, y la a veces limitada capacidad de recursos que existian, no como ocurre en el actual, donde todo está al alcance de cualquier mano y claro esto es un peligro, porque a saber que manos toman lo que toman, aun así dentro del cine mudo podemos encontrar de todo como esta bien claro.

Esta obra para nada se me antoja difícil para el espectador de su época no olvidemos que en el nacimiento del cinematografo los espectadores querian que se les mostrara todo aquello, que no eran capaces de ver in situ con sus propios ojos, y esta obra se me antoja intimista y de autor, basada en una novela de Edgar Allan Poe, y teniendo como ayudante de dirección a Luis Buñuel , ya podemos imaginar el conjunto de caracteres que podemos encontrar en la obra.

Aun basandose en la novela de Poe, no llega a ser de terror, en esta ocasión parece que gana más la partida el cineasta español, como si de un duelo se tratara, porque el film rezuma expresionismo y simbolismo, por los cuatro costados, toda ella tiene una clarísima influencia de la primera etapa de Buñuel, y realizar este tipo de cine a esas alturas me parece bastante arriesgado, y de esto adolece la obra, a veces llega a aburrirnos, ante los largísimo planos, que realmente son insustanciales y que dicen muy poco aportando poco valor al conjunto total.

Aun así hay escenas bastante curiosas en las que se utilizan elementos capaces de realizar unos muy dignos efectos visuales, estamos ante una realización tenebrista, muy oscura, con elementos muy significativos y representativos, una ambientación muy magnificada que intenta reflejar la pequeñez del hombre, en este caso Roderick (Jean Debucourt) de la familia Usher frente a la historia y el arbol genealógico de su familia, la cual se extinguirá cuando el anteriormente mencionado miembro desaparezca.

Madeleine (Marguerite Gance) es la razón de la existencia del propio Roderick, ante el irreversible mal etado de salud de ella, él intenta preservarla para la historia, y he aquí donde surje la dicotomía de cómo hacerlo si a través de la música representada por la guitarra o de la pintura, decantánose por esta última, y realizando un obsesivo retrato que acaba llevando al propio autor al delirio, a la locura y la incredulidad ante la muerte de su amada, pareciéndole en todo momento que ella está viva dentro del lienzo.

Un elemento que me resulta curioso de la versión vista es que la musica que acompaña a la filmación no es la típica de piano, sino música de arpa, quizás mas apropiada para generar la atmósfera que el director pretendía.


TRONCHA

miércoles, 16 de mayo de 2007

"Running out of time" (I y II) de Johnny To

Lo primero y antes de decir nada debo hacer justicia y comentar que esta película y su secuela (Running out of time 2), que a posteriori pasaré a analizar me han parecido dos de los trabajos más entretenidos de los comienzos del genial director hongkones, trabajos dentro de lo comercial, algo a lo que nunca ha renunciado este realizador a que sus obras aparte de tener calidad también den un buen resultado en la taquilla, características ambas que parecen reñidas en muchos ejemplos del cine actual.

En esta primera parte To, nos muestra una historia trepidante, sin descansos, con continuas sorpresas en el guión, giros que no fuerzan en absoluto el resultado final de la historia llevandola por derroteros inverosímiles, todo lo contrario, consigue que mantengamos la atención en todo momento, sin permitirnos en muchas ocasiones pestañear, ante el peligro de perdernos algo relevante.

Los protagonistas son dos, Cheung (Andy Lau), el antihéroe, el ladrón de joyas en fase terminal que decide acometer un último trabajo, que le permita retirarse en la cumbre del delito, haciendo algo relevante, un personaje, al que el director decide humanizar, que no nos parezca un delicuente al uso, que su faceta como persona cobre más relevancia que la de ladrón, y a fe que la interpretación de Lau, lo consigue.

Enfrente está el personaje del negociador Ho (Ching Wan Lau), un carismático policía que acepta las condiciones del juego propuesto por su contrincante, y de esta manera añadiendo mordiente a su trabajo, olvidando la cotidaneidad y hastio que la mayoría de los casos podrían podrucirle, ambos alcanzan tan complicidad en esta persecución, que parecen todo lo contrario a un par de enmigos.

El elenco de actores secundarios son de los habituales de los trabajos posteriores de este realizador, está el inspector Wong Kai Fa (Shiu Hung Hui) con cierto aire de clown, algo que veremos en posteriores films, las mujeres no me parecen de lo más acertado, sus papeles son mas que secundarios, en ocasiones meramente circunstanciales, como el de la bonita historia de la chica del microbús (YoYo Mung), algo típico de su influencia melviliana.

Se me antojan muchisimas influencias más del cine de Melville, por ejemplo a esta exaltación de la amistad especial entre dos hombres, a lo que supone que independientemente del bando donde estes, existe un codigo de honor, no escrito, pero que ambos personajes respetan, también la minuciosidad y el tempo a la hora de rodar ciertas escenas, donde todo parece calculado, milimetrado, en definitiva cronometrado, para que cada acción ocurra en la milésima de segundo que está prevista.

Todo esta serie de circunstancias la convierten en una película altamente recomendable, y que deja ver la calidad que a posteriori podremos ver en posteriores películas de este director.

Respecto a la secuela me da la sensación de que esta película se rodó como consecuencia del éxito en taquilla de la anterior y una vez más debemos decir la tan manida frase, segundas partes no fueron buenas, o al menos tan buenas como las primeras, y hay una razón obvia para afirmar esto, la segunda parte no goza de la frescura y la originalidad de la primera, al visionarla nos damos cuenta que muchas cosas ya las hemos visto antes.

Se repiten los patrones de los personajes, ahora el negociador Ho a ascendido y es inspector Wong, pasa a ser su ayudante y el ladrón ahora es otro (Ekin Cheng), pero la historia es prácticamente igual de principio a fin, es más muchas de las escenas se repiten, de forma literal, se repite el juego y los papeles son redundantes.

Sin desprestigiar por ello el cine del premiado realizador en el festival de Sitges , me voy a permitir la licencia de comentar, que este trabajo se le podia haber ahorrado, si a lo mejor mi pretensión es mucha, pero sinceramente amarga un poco el buen regusto que nos deja la primera.

Disculpame Des, por lo que voy a escribir, a veces To desciende de los cielos para humanizarse y volverse comercial para llenar la saca

TRONCHA

lunes, 14 de mayo de 2007

"Karhozat" de Bela Tarr

Esta es mi primera incursión en el cine del director húngaro, esto supone un aperitivo para el dia qen el que me vea capacitado, preparado, vitaminado y supermineralizado para enfrentarme a su obra más marathoniana, Sátántangó un film de 450 minutos de duración, debo decir que he quedado bastante satisfecho de la obra y espero que el futuro me siga deparando alegrias a esta relación que hoy comienza.

Desde la primera a la última escena la película no cambia, me explico, vamos a encontrar la mista técnica en todo momento, el mismo sistema de encuadres, el mismo movimiento de cámara, por supuesto dentro de una película que esteticamente es sublime, a veces incluso tenemos la sensación de estar frente a un antiguo album de fotos en el que aparecen personajes que entran en los magistrales encuadres y acaban saliendo ellos solos, sin que la camara se inmute.

Esta forma de rodar tan sensible, hace que la película tengo un tempo singular, parece que la acción está continuamente parada, a pesar de ir evolucionando, de ir sumandose personajes cada vez más y más hasta prácticamente concluir todos en la fiesta final, de esos personajes de diálogos profundos que sorprendentemente siempre unos escuchan a los otros con sumo respeto y que reflejan los sentimientos de los interlocutores.

Al tener la alta calidad estética que comentaba antes, cobran mucha importancia las localizaciones, cargada en todo momento de mucho simbolismo, de elementos muy definidos, de la constante presencia de perros por las calles, de ese omnipresente cielo estañado (color estaño) y de la intermitente lluvia que parece hacer un intento de purificación de los pecados de los protagonistas, cada vez que aparece, todo este conjunto cobra la relevancia de un personaje más dentro de la obra.

En este trabajo de Tarr, realmente importa poco el argumento o la línea narrativa, más bien intenta mostrarnos un compendio de sentimientos entre los personajes, enseñarnos una gama de dificultosas relaciones que acaban desembocando en tortuosos y complicados finales, y todo ello como se interpreta desde la primera escena, achacando la culpabilidad de la deshumanización de las personas en cierta manera a la industrialización y al progreso, devoradores ambos en la actualidad de las vidas de los individuos.

TRONCHA

viernes, 11 de mayo de 2007

"Sorok Pervyy" (El cuarenta y uno) de Grigori Chukhrai

A veces nos perdemos muchas cosas en la vida, cosas que no podremos ver o de las que no podemos ser testigos, en ocasiones por culpa nuestra y en otras precisamente por decisiones de otros que de alguna manera acaban afectándonos, es curioso, pero es así, debido a cierto regimen político que gobernó en nuestro país, durante un muy dilatado numero de años, películas como esta eran impensables que aparecieran por aquí, solamente por el hecho de haber sido rodada por el bloque soviético.

Lo primero que cabe destacar del film, es la iluminación, desconozco si esto es por el sistema de filmación, o por retoques posteriores en el coloreado de los fotogramas, el caso es que el director nos rodea de una atmosfera extraña, invadida por los grises, rojos y rosas, todos en sus tonalidades más pastel, en un enclave como el desierto de Gobi, donde una patrulla del ejercito rojo intenta sobrevivir al haber escapado de un ataque de las fuerzas zaristas.

El grupo habita en condiciones de naturaleza extrema, tanto físicas como psíquicas se supone que su habitat va a ponerles a prueba a todos para ver cuanto pueden dar de si sus propias vidas, en el grupo está Maruskha (Izolda Izvitskaya) una consumada francotiradora que lleva la cuenta de los enemigos abatidos, nunca falla, solo al disparar al numero cuarenta y uno, el teniente Nikolayevich (Oleg Strizhenov). Piensan que al poder salvar el escollo del desierto todo acabará y entregaran al prisionero para que declare ante las autoridades militares revolucionarias, pero nada más lejos del deseo de Maruskha.

En este puto es donde el film da un vuelco convirtiéndose en un alegato total a los sentimientos y sobre todos ellos el supremo el del amor, pero incondicional, sin barreras, sin uniformes, sin ideologías, sin condición social, puro y sin contaminar por el mundo exterior, tomando a la pareja como eje central de rotación del universo, todo es perfecto apartados del mundo, solamente hay problemas cuando vuelven a la realidad cuando aterrizan en el mundo tangible y cotidiano.

Después de pensarlo algún tiempo se me antoja el film como bastante propagandista como reivindicativo como si alguien necesitara justificar de alguna manera la condición humana de los integrantes del ejército revolucionario, es como si quisiera hacer un reflejo de ellos como personas normales y sensibles, como el resto de los seres mortales. No deja de ser un documento bastante curioso, incluso por la tentativa de globalizar a los personajes a través de la literatura, haciendo un simil entre los protagonistas y Robinson Crusoe.

Para finalizar observar que en todos los sitios cuecen habas y que ni el cine de un sitio, ni el de otro es mejor ni peor, el cine es cine y cualquier persona en cualquier punto de este planeta hará algo que merezca nuestro tiempo y que podamos ser capaces de apreciarlo.

TRONCHA

miércoles, 9 de mayo de 2007

"Malas calles" de Martin Scorsese

De esta película había oído algo, sobre todo a raíz del último estreno del realizador italo-americano Infiltrados (The Departed, 2006), y en efecto podría servirnos de precedente, por supuesto que la película que estoy comentando ahora es de los comienzos de Scorsese, y que todavía le queda mucho recorrido a su cine para llegar a sus trabajos más recientes, pero de alguna manera en este trabajo ya se van viendo algunas características que no va a abandonar nunca.

Para ser sincero ante todos, declaro que no me considero excesivamente devoto del cine de este realizador, y bastante menos aun, de esta su última etapa hasta ahora, creo que se ha convertido en el típico acomodado de la industria, en uno de esos directores que sabe a ciencia cierta que ruede lo que ruede, va a tener detractores y gente a favor, pero que como resultado final, acabará llenándole las arcas, e incluso de vez en cuando le darán alguna estatuilla, por muy injusto que esto nos parezca.

En este caso a diferencia de Infiltrados donde los personajes pertenecen en su gran mayoría a la mafia irlandesa, en Malas calles, pertenecen a la mafia italiana, a través de un grupo de jóvenes que desean vivir la vida, nos sumergimos en este mundo, en el que lo difícil es sobrevivir en las calles, y por supuesto por las directrices marcadas por los padrinos, nada escapa de su control y lo mejor es que no intentes revelarte contra todo esto.

Charlie Cappa (Harvey Keitel) y “Johnny Boy” (Robert De Niro), son dos de esos jóvenes ávidos de tragarse la vida a empellones, la elección de estos actores para los personajes es lo más idóneo que se me antoja de la película, en donde podemos apreciar a ambos con una juventud notable, cuando en la actualidad están convertidos en dos de los grandes, el personaje de Johnny es visceral, desarraigado, vive la vida, sin concesiones, no necesita preocupaciones, todo esta ahí delante solo hay que tender la mano y alcanzarlo, Charlie es su antítesis, más comedido, quiere hacer las cosas bien, que todo vaya dentro de los cánones, tranquilo y sosegado, pero por encima de ambos está la amistad que les une.

El realizador en esta obra se asoma a la problemática de ciertos temas de calado social, como por ejemplo el tema del racismo, el cual parece costar la felicidad del protagonista, también hace un leve toque sobre el tema de la homosexualidad, incluso la forma de acometer el mundo de la mafia me parece muy leve, no profundiza en ninguno de estos aspectos, y bajo mi punto de vista es aquí donde pierde fuerza la historia.

Da la sensación como que le ha faltado cierta valentía para exaltar algunas temáticas o aspectos, pero realmente es algo muy característico en general del cine de Scorsese, no me parece un cineasta que se implique, que reivindique o denuncie nada, en este caso incluso viendo el final parece que la historia se le viene encima y no sabe como quitársela, ni siquiera se le ocurre poner The end.


TRONCHA

lunes, 7 de mayo de 2007

"Russian Ark" de Aleksandr Sokurov

Hay tipos y tipos de películas el caso que ahora mismo estoy describiendo lo denominaráia del tipo personal, y para mi el encasillarlo de esta manera supone que en muchas ocasiones la obra en si o el resultado final de la misma parece que tan solo lo comprende el propio autor de la misma, el mensaje que nos transmite no llega de la misma manera que cuando estamos delante de una historia o un guión más sencillos, aunque también es justo decir que en ocasiones estas producciones no tienen más que lo que vemos, si rascamos la superficie no hayamos mucho más.

La obra es una especie de película documental muy artística en la que el autor nos da un paseo por el Museo Hermitage de San Petesburgo, a través de la figura de un desconocido (Sergei Dontsov) que parece extrapolado de otro tiempo, y que en ocasiones se encuentra en un deja vu frente a escenas y situaciones que ya ha vivido con anterioridad, mostrándonos la amplia variedad y riqueza que albergan los muros de tan prestigiosa pinacoteca.

En este recorrido por las salas, aparte de apreciar los valiosos tesoros artísticos, el desconocido y el narrador que le acompaña a todas partes como si realmente fuera la figura del espectador, se encuentran a algunos personajes de calado histórico como Pedro I de Rusia y Catalina la grande, Alexander Pushkin, etc. y también personas normales de la vida cotidiana y actual que están relacionadas con el museo, los diálogos van referidos a la historia de Rusia, pero no se me antojan de gran profundidad, a veces me parecen meros comentarios, sin tono de critica ni de alabanza.

La obra transcurre en una única toma, es así de sorprendente y original, no hay cortes, nos sumergimos en un continuo travelling, que nos transporta por distintas sala s y dependencias, y a través de ellas el continuo viaje entre personajes del siglo XVIII y personajes del siglo XX, incluso en ocasiones acaban entremezclados, a veces da la sensación, de estar sumergidos en un extraño sueño, pero ante todo como meros observadores.

Su originalidad es patente, sobre todo por su rodaje, una sola toma, pero esto no lo convierte en una obra maestra ni mucho menos, es algo para ver, que no asimila cualquier estomago, y que me parece de un presupuesto altísimo por vestuario y extras.

TRONCHA

viernes, 4 de mayo de 2007

"Le deuxième souffle" de Jean Pierre Melville

You can read this text translated into english at: Le deuxième souffle

Des y yo comenzamos esta andadura del blog, por supuesto llenos de ilusión, no pensabamos que tanta gente pudiera entrar y leernos, si solo una persona de todo este infinito universo que es internet leia lo que habiamos escrito nos dariamos por satisfechos, de verdad que eso reconforta, probad y vereis; pues bien viendo como pasabais a leernos y contarnos nos propusimos que con la llegada de la entrada 10.000 ambos publicariamos algo especial (con esta declaración quedas obligado amigo), y yo he elegido una película que a ambos nos apasiona, y que a continuación paso a reseñar.

..........ooo00000ooo..........
A mi hijo Diego, ojala algún día sienta el cine como lo siento yo.

Cuando me dispuse a ver esta película de alguna manera tenia mis temores, nunca me ha gustado decepcionar a mis seres queridos, en este caso un amigo, y necesitaba verla con calma, un dia que estuviera receptivo y en el que pudiera ser capaz de asimilar todos los conceptos y distintas situaciones de este film, por ello intentaré no defraudarle con las palabras a continuación descritas, e incluso aprovecho esta ocasión para dedicársela a él, al que agradezco que me haya empujado a este mundillo.

Para empezar podría decir que estamos ante una película de grandes personajes no quizás una gran película en si, por supuesto que lo dicho por mi parte es una solemne estupidez, pero si que hay que reconocer que los personajes están muy por encima de la historia y sobre todo Gustave Minda (Lino Ventura) y el comisario Blot (Paul Meurisse), que este comentario no de lugar a equivocaciones, el que los personajes estén a dicha altura no quiere decir que no veamos una buena película con escenas muy destacadas y rodadas magistralmente por el maestro francés Jean-Pierre Melville.

Una vez más dentro del universo Melville, dentro del cine polar más auténtico, figuraos de que manera que hasta en el comienzo del film se nos advierte de que los autores de la obra no comparten los principios morales de “Gu” (Gustave Minda), y que la historia no tiene que ver con la realidad, yo supongo que el astuto director con este mensaje consigue crearnos aun mayor expectación a la hora de encarar la película.

Vamos a encontrarnos multitud de elementos con el sello del realizador galo, y bastante habituales en sus obras, uno que siempre me ha gustado y me parece muy novedoso es el uso de los espejos, para capturar esa imagen que siempre hay en segundo plano, sin abandonar el enfoque del primero, juega con sus reflejos, y siempre aparecen muchos de ellos en las ambientaciones, es un recurso muy utilizado, incluso para dar dramatismo a algunas de las escenas.

La importancia que se le da a los coches, esos coches impecables, encerados y brillantes, de una alta cilindrada y totalmente imprescindibles para perpetrar los robos, fugas y tramas planeadas por sus ocupantes, los cuales no tienen mucho que envidiar a sus vehículos ya que tanto vayan a tomar una copa a un club, en el que muy probablemente haya un conjunto de señoritas ensayando o realizando algún número de su espectáculo o vayan a perpetrar un robo, siempre irán impecablemente vestidos y con una estilo único, del primero al último.

En general Melville suele mostrarnos un universo bastante amplio de personajes en sus películas, estos siempre suelen estar muy definidos y perfectamente encajados dentro de cada uno de sus roles, los de esta película para nada tienen desperdicio, de entre el conjunto comenzaría destacando a Alban (Michel Constantin) el perro fiel, seguidor de sus amos hasta el fin aunque con ello le vaya la vida, la cual daría por sus jefes sin dudarlo ni un instante; Orloff (Pierre Zimmer) es la personificación de la justicia, del honor entre caballeros, de la amistad pura, es un personaje muy curioso, defiende grandes valores dentro del mundo del hampa, algo que pudiera parecer contradictorio pero que encaja a la perfección dentro de la trama; Manouche (Christine Fabréga) la servicial y compasible, descanso del guerrero al que según ella ha nacido como es, y nunca va a cambiar, castigada por el amor en particular y la vida en general; al igual que el tema de los amistad entre hombres en el cine de Melville ha sido tan comentado, el tema femenino no se queda atrás y quizás merecería capítulo aparte.

Entre todos destacan dos y por el orden que los nombro “Gu”, Gustave Minda y el comisario Blot, el comisario, uno frente al otro, dos personajes llenos de fuerza, con una personalidad arrolladora y que en sus intervenciones llenan la pantalla, el comisario, rebosa ironía y astucia por los cuatro costados, es sagaz, como sino sería posible que andara metido en el enrevesado mundo de la mafia marsellesa y al mismo tiempo fuera tan respetado por ellos. Gu, enemigo público número uno, recientemente fugado de presidio, físicamente ya no es el mismo, pero su código está grabado en el interior de su alma y eso nunca se olvida, tanto el rencor como el respeto hacia sus compañeros de profesión. Dos antagonistas que se acabarán enfrentando y que si somos algo conocedores del cine de este director claramente sabremos quien se alzará con el triunfo en la partida.

El conocimiento demostrado en la realización, sobre el mundo del hampa y de la mafia, parece casi demostrar que el propio realizador perteneciera a alguna de esas bandas organizadas, doy por supuesto que esto no era así, pero no niego que seguro que algunas entrevistas debió tener con gente del otro lado de la ley, para que de alguna manera documentarse, y que por otro lado llegará incluso a entusiasmarle, y eso es lo que Jean-Pierre nos transmite en este film, una especie de atracción fatal y de cierto cariño hacía este mundo al margen de la ley, el cual está lleno, de códigos de honor, de respeto entre gente honorable, de honestidad porque no decirlo, aunque tratemos con ladrones y criminales, nos muestra un mundo incluso comprensible y con el que parecemos empalizar, aunque moralmente no sea muy correcto.

Por supuesto no quiero desvelar aquí el contenido del largometraje y mucho menos quitar la intriga del mismo pero destacaría dos escenas soberbias, cuando en el club de Paris, regentado por Manouche, llegan unos hombres y tirotean a Jacques, apodado “el notario” (Raymond Loyer), acto seguido llega la policía y a la cabeza el comisario Blot, que hace una disertación magnífica cargada de ironía, con un humor negro exquisito, dándole una gran importancia al diálogo, algo no muy habitual en el cine de este director. La segunda escena a destacar, es la del robo, su preparación, y posterior ejecución del mismo, aquí me imagino a Melville, cronómetro en mano, como si él mismo formara parte de la banda, vigilando segundo a segundo que la escena se ejecutara como previamente la había visionado en su mente.

Quisiera concluir diciendo que me parece una obra de magnífica composición y factura y que es totalmente imprescindible de ver para los amantes del cine negro en general y de Melville, y porque no para cualquier amante del cine, que quiera pasar u fabuloso rato, disfrutando de esta maravilla.


TRONCHA

miércoles, 2 de mayo de 2007

"Surf Bélico" de M.M. Buckner

Esta novela fue la ganadora del Premio Philip K. Dick en el año 2006. Durante su lectura he tenido una sensación extraña. Al principio del libro estuve a punto de abandonar su lectura. Tanto la temática, como la forma en que estaba escrito (o parecía estarlo) me echaron para atrás, parecía un porquería, por decirlo sin tacto. Pero, según he avanzado en su lectura me he dado cuenta de que el error era mío. La autora me ha demostrado que es inteligente y que yo no estaba a la altura. O eso, o realmente toda la trama y desarrollo de la novela están diseñados para producir este hábil engaño.
Voy a tratar de explicarlo. Según comienzas a leerlo parece una novela juvenil, pero tonta, sin nada que decir. Según avanzas te das cuenta de que es el narrador protagonista el que ve el mundo de una manera tonta e infantil, pese a tener como se anuncia en las primeras líneas 248 años. Las reflexiones en torno a las cuales gira la trama son de alto nivel, inmortalidad, vejez y senilidad, destino de esta sociedad actual y en el fondo sobre lo que es el ser humano. Pero todo esto se ve cuando te das cuenta de lo que realmente va el libro, antes parece peor que una novela pulp de los años 30 pero mala mala mala.
En el párrafo siguiente voy a describir una parte del argumento que se ciñe a las primeras páginas de la novela. Creo que es importante hacerlo para que se entienda mi opinión sobre la novela pero lo aviso para el que no quiera no lo lea.

===========Spoiler primeras paginas==============

El protagonista, Nasir, ha participado en el desarrollo de la sociedad del siglo XXIII, como ya he dicho tiene 248 años y es extremadamente rico. Para poder sobrevivir en la tierra, totalmente contaminada e inhabitable en su superficie, la sociedad se ha escindido en 2 castas muy separadas entre sí, unos lo poseen todo (ejecutivos) y otros nada (trabajadores). Los ejecutivos tienen a su servicio las más avanzadas técnicas médicas nanotecnológicas, esto les permite la gran longevidad de la que "disfrutan", también tienen la mejor educación y por supuesto una gran oferta de ocio. Por todo ello están hastiados de vivir. ¿Que hacen? se dedican a "jugar" a la guerra haciendo pequeñas incursiones en las revoluciones proletarias que organizan los trabajadores. Estas son verdaderamente "guerras" donde la gente muere. La casta ejecutiva para divertirse se acerca todo lo que puede para tomar imágenes de la muerte de los trabajadores y ponerlas en la red, estas incursiones son lo que se conoce como "Surf Bélico". Así se divierten y obtienen puntos para demostrar quien es el más arriesgado, pese a que realmente no hay gran riesgo mortal (aunque si pueden perder su rango ejecutivo, que para ellos es muchísimo peor). Hay un ranking a nivel mundial y Nasir y su grupo (los Agonistas) son los números 1 absolutos del Surf Bélico.
A mi me parece un planteamiento rebuscado al menos... poco consistente diría. Pero...
En el fondo el problema es que el sistema social de la novela se ha convertido en un status quo insostenible. Es heredero de este en la que vivimos y tiene su razón de ser en la gran catástrofe planetaria que hace que no se pueda vivir en la superficie de la tierra. Llega a tal punto el anquilosamiento social que las personas no son siquiera capaces de darse cuenta que ven la realidad deformada por lo rígidas que son sus posiciones sociales. Es como si a un señor feudal de la Edad Media intentáramos explicarle que son los derechos humanos (o al revés, si intentamos explicárselos a un siervo).
Es en esta realidad deformada que perciben los personajes donde sostengo que la autora ha sido muy hábil. Al principio de la novela parece que las motivaciones son inexistentes o muy extrañas, pero lo que ha conseguido es que actúen con coherencia frente a la sociedad descrita.

========Fin del spoiler primeras paginas=========

Aparte de todo lo anterior, la descripción tecnológica futura es muy fresca y novedosa, sobre todo la nanotecnología, la evolución de internet y el desarrollo espacial. En la contraportada se indica que es una novela Cyberpunk, yo diría que estéticamente puede, pero en el fondo creo que es una novela a la que no deberían achacársele tópicos.

La traducción de Lorenzo Isaac Luengo Regalado pienso que es buena y no he encontrado los errores tipográficos acostumbrados de la Factoría (creo que están mejorando mucho en este aspecto).
Como resumen general creo que estamos ante una buena novela de Ciencia Ficción y recomiendo su lectura.

Pagina oficial de la autora
http://www.mmbuckner.com/
Por cierto, como concepto... Surf Bélico... me recuerda mucho a cierta maravillosa película de Coppola...
DES