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viernes, 20 de marzo de 2009

"1984" (1984) de Michael Radford

Tercera versión consecutiva de la misma historia, pero no se vayan a pensar que por ello es la de menos trascendencia o la menos importante, he de reconocer que cada una de ellas tiene sus particularidades y está hecha de una forma totalmente distinta y esto es lo que las da su importancia a nivel individual sin que una sirva para menosprecio del resto, cada una tiene sus formas, su público y su propia influencia.

En el caso con el que ahora mismo estamos, simplemente el primer vistazo al film ya nos damos cuenta que las localizaciones no tienen nada que ver con las vistas en las dos anteriores ocasiones Radford ha creado un mundo mucho más post apocalíptico, mostrándonos las huellas que ha dejado la guerra, esa en la que está sumida la nación desde hace tanto tiempo y cuya pretensión es la paz.

Todo es mucho más gris que en ocasiones anteriores, si ya de por si la vida de los humanos nos parecían desgraciadas en esta ocasión nos lo parecen aun más todavía, el régimen da la sensación de ser más recio, quizás nos lleva a pensar que estamos ante un gobierno que roza el nacional socialismo, esto ya lo habíamos vivido en los ulteriores ejemplos, pero aquí es donde está aun más marcado.

Elogiar los papeles interpretados por dos de los protagonistas, Winston Smith (John Hurt) es un papel totalmente clavado, nos transmite sus temores e irrebeldias como el propio personaje las vive, transciende la pantalla totalmente, Hurt se mete dentro del papel de una manera totalmente increíble, incluso no desentona del entorno austero en el que se desenvuelve, todo en esta versión es mucho más explicito, incluida la violencia y sobre todo el sexo.

Todo este conjunto de elementos hace que nos posicionemos ante el más descarnado film que se ha hecho hasta ahora de la famosa novela de Orwell, y para que todo vaya en consonancia se nos muestra a un O'Brien (Richard Burton) más duro de lo que nos podíamos imaginar, un personaje en el que no caben os sentimientos hacia el prójimo y al que este no le preocupa lo más mínimo, hará todo lo que esté en su mano para que el sistema siga adelante y no se tambalee ni por el más nimio temblor.

Después de haber disfrutado de todas ellas no puedo más que recomendar a la persona que lea esto que repita este mismo ejercicio que servidor ha hecho, por supuesto que encontrarán la misma historia, pero con distintos matices, quizás la primera más austera y cercana al expresionismo del cine alemán, la segunda más complaciente y directa y por último esta tercera, totalmente desgarradora y al mismo tiempo con ciertos tonos oníricos, ya saben adéntrense en las tres y pasen por aquí a comentar que les han parecido.




TRONCHA

2 comentarios:

Nelson, un habitante del patio dijo...

Sólo he visto esta versión de Radford, y debo señalar que me gustó bastante.Burton tiene un personaje de antología...hasta podría decir que brilla más que el protagonista.
Saludos,

Anónimo dijo...

Parece mentira Nelson pero yo vi las tres, practicamente seguidas y todas tienen sus propias particularidades incluso partiendo del mismo punto, te recomiendo hagas el mismo ejercicio de visionado que realicé yo.

Saludos...