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viernes, 16 de febrero de 2007

"Natural City" de Min Byung-Chun

El mundo de la ciencia ficción siempre me ha gustado, doy de esa generación de personas que George Lucas con su sagrada trilogía marcó nuestras vidas, desde ahí uno acaba viendo casi todo lo que cae en sus manos de este genero, quizás por descubrir como realmente viviremos en unos años, o décadas, o como lo harán nuestros hijos, el caso es que a veces incluso me da la sensación de que veo ese futuro que nunca acaba de llegar, por el motivo que sea, quizás esto sea bueno, incluso.

En este caso Natural City, viene a ser un poco más de los mismo de lo que ya hemos visto en otras ocasiones en múltiples realizaciones anteriores, además es que parece en algunos casos que la industria ha entrado en una extraña espiral de falta de imaginación, es como si se hubiera llegado a un tope y de ahí no pasaran. Aquí estamos en muchas ocasiones ante escenas que ya hemos visto en The Matrix, e otras tantas que no voy a ponerme a citar ahora.

La historia como en muchas ocasiones en películas de este genero tiene una base de romance, algo que sinceramente no se porque es un tema tan recurrente, quizás para de alguna manera intentar humanizar el futuro que se nos presenta tan mecánico, por muy extraño que pueda parecer un policía de élite R (Ji-tae Yu) se enamora de una ciborg Ria (Rin Seo), que caduca dentro de poco y cuyo empeño es salvarla para darle una nueva vida a través de otro cuerpo en este caso humano el de Cyon (Jae-un Lee), aplicando una nueva y revolucionaría técnica que ha descubierto el excéntrico Dr. Giro (Eun-pyo Jeong), el cual al final resulta ser un Cyper (Doo-hong Jung) un ciborg de combate perfectamente entrenado y entre todos ellos un perfecto y fiel cumplidor de la ley Noma (Chang Yun), jefe de R y que intenta evitar que todo lo anterior pase.

Con todo esto nos situamos en una sociedad de la posguerra, posterior a la recurrente guerra nuclear que está por llegar, y a esos reducidos grupos de seres humanos que luchan por hacerse un hueco en el que fue su mundo y de alguna manera les ha sido arrebatado por los robots, que el propio hombre creo en su dia, todo ello enclavado en una historia con un final de corte totalmente apocalíptico, pasando por el clásico intento de dominio del orbe terrestre por la figura del malhechor, y todo ello con la consabida dosis de sacrificio a favor de la humanidad por parte del héroe de turno.

Pongan todos estos ingredientes descritos y agítenlos, tras tenerlo unas dos horas, saldrá una película con un metraje largo, con buenos recursos de ordenador, que nos dará la sensación en muchas de las ocasiones de estar frente a un videojuego, pero que no nos logra atrapar e incluso entretener.


TRONCHA

2 comentarios:

Antonio Rando dijo...

A mi me gustó mucho. Siempre cada uno quitaría o pondría esto y lo otro en todas las pelis, pero bueno. Quitando el aspecto visual, que a mi personalmente me pareció bastante impresionante, me gustó la dimensión dramática, y la inyección de romanticismo, raro en la ciencia-ficción, y más en el cine de género oriental. La verdad que yo la recomiendo, me parece que tiene bastante fuerza e interés.

Anónimo dijo...

gracias por tu comentario irian-