"Mephisto" de István Szabó
Hay veces que el individuo acaba convirtiéndose en la marioneta manejada por las manos de otro, sin poder siquiera influir en su propio destino, tomamos decisiones que nos comprometen dependiendo de quien esté a nuestro alrededor y de lo que a nuestros propios seres queridos pueda influirles, algunas determinadas por el propio miedo llegando un momento en el que uno acaba perdiendo su propia identidad sin llegar a saber hasta donde a llegado y en que se ha convertido realmente.
Algo similar es lo que le ocurre a nuestro protagonista el gran actor hamburgués Hoefgen (Klaus Maria Brandauer), la historia narra la vida de este personaje que está basado en la novela con el mismo título y escrita por Klaus Mann, la cual todo haya que decirlo estuvo rodeada de bastante polémica su publicación ya que supone un ataque frontal contra el régimen de la Alemania nazi.
Hoefgen se proclama como el actor del pueblo, defensor del bolchevismo y precursor de las ideas de izquierdas, primero en provincias para posteriormente pasar a Berlín, pero de repente los acontecimientos políticos se precipitan y acaban influyendo en su vida aunque él intenta negarlo por todos los medios alegando siempre que es un actor y que el arte continua en estado puro por encima del resto de las cosas.
Poco a poco según su carrera va ascendiendo hasta convertirse en director del teatro nacional prusiano por supuesto bajo el auspicio de los poderes nacionalsocialistas, se va dando cuenta como el ascenso es tan solo profesional, y que la proporción de cómo se refleja en lo personal es de sentido proporcionalmente inverso, todo su alrededor se desmorona aunque piense que su entorno lo maneja él, se acabará dando cuenta que solo es alguien encima de las tablas que en cuanto se echa el telón es manejado y aparecen los hilos de su dueño.
Por supuesto que el film en general y como ya se habrá podido intuir de mis palabras es una total crítica al régimen nazi y el auge que tomo en su momento, por supuesto que nunca estaré a favor de este tipo de política, pero si debo reconocer que le dieron una importancia suprema a ciertos aspectos de la vida que otros regimenes totalitarios ni siquiera llegaron a tener en cuenta, los nazis, tuvieron siempre muy presente la influencia es elementos tales como el teatro, el cine, la publicidad en sí en la población y por ello se les presto el interés comentado.
TRONCHA
Algo similar es lo que le ocurre a nuestro protagonista el gran actor hamburgués Hoefgen (Klaus Maria Brandauer), la historia narra la vida de este personaje que está basado en la novela con el mismo título y escrita por Klaus Mann, la cual todo haya que decirlo estuvo rodeada de bastante polémica su publicación ya que supone un ataque frontal contra el régimen de la Alemania nazi.
Hoefgen se proclama como el actor del pueblo, defensor del bolchevismo y precursor de las ideas de izquierdas, primero en provincias para posteriormente pasar a Berlín, pero de repente los acontecimientos políticos se precipitan y acaban influyendo en su vida aunque él intenta negarlo por todos los medios alegando siempre que es un actor y que el arte continua en estado puro por encima del resto de las cosas.
Poco a poco según su carrera va ascendiendo hasta convertirse en director del teatro nacional prusiano por supuesto bajo el auspicio de los poderes nacionalsocialistas, se va dando cuenta como el ascenso es tan solo profesional, y que la proporción de cómo se refleja en lo personal es de sentido proporcionalmente inverso, todo su alrededor se desmorona aunque piense que su entorno lo maneja él, se acabará dando cuenta que solo es alguien encima de las tablas que en cuanto se echa el telón es manejado y aparecen los hilos de su dueño.
Por supuesto que el film en general y como ya se habrá podido intuir de mis palabras es una total crítica al régimen nazi y el auge que tomo en su momento, por supuesto que nunca estaré a favor de este tipo de política, pero si debo reconocer que le dieron una importancia suprema a ciertos aspectos de la vida que otros regimenes totalitarios ni siquiera llegaron a tener en cuenta, los nazis, tuvieron siempre muy presente la influencia es elementos tales como el teatro, el cine, la publicidad en sí en la población y por ello se les presto el interés comentado.
TRONCHA
4 comentarios:
Pues esta es una de las que tengo pendientes de Szabo. Y mira que hace mucho que conozco de ella, pero aún no ha caído en mis manos.
De este director he visto Sunshine, Conociendo a Julia y Hanusen, y todas son distintas, no tienen nada que ver una con la otra, y las tres recomendables. Por lo que comentas, Mephisto también está en una línea distinta. Tendré que buscarla, pero ya!
Un saludo.
Tampoco he visto esta cinta. Me interesa bastante todo lo que trata sobre temática del terrible régimen nazi, asi que tendré que ver esta cinta sea como sea.
Gran reseña. Saludos, Jorge.
No conosco la pelicula ni a su director... habra que echarle un vistazo...!!!
Para mí, desde luego es la mejor de la trilogía se Szavo.
Por cierto, Albert Boadella, el flamante director de Los Teatros del Canal de Isa.. de Esperanza Aguirre, está viviendo la misma historia en la vida real.
Saludos.
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