"Kekec" de Joze Gale
¿Que decir de Kekec? Pues la verdad es que me tuve que documentar un poco por Internet y algunos otros sitios para darme cuenta realmente de la naturaleza del personaje y la verdad es que de forma algo sorprendente me doy cuenta que es una especie de héroe infantil de la cultura yugoslava, perdón ahora en la eslovena, que el mapa ya no tiene nada que ver con el que estudiamos algunos de los que ya no somos tan jóvenes en el colegio, conclusión una especie de Pedro el de Heidi, para que se hagan una idea.
Esta obra está dedicada a esta especie de Pulgarcito, le denomino así para que ustedes tengan una referencia más o menos conocida, el personaje es un Juan sin miedo, Kekec (Matija Barl) decide enfrentarse a Bedanec (Franc Presetnik) una especie de ogro pero humano a pesar de las advertencias de sus amigos los cuales le temen como si del propio diablo se tratara.
La obra supone un completo canto a la naturaleza y la armonía en la que esta podría vivir con el hombre si realmente así se lo propusieran los humanos, el protagonista si que logra ese estatus que le permite enfrentarse a cualquier cosa y que de alguna manera acaba reforzando sus propios principios de justicia e igualdad, Kekec no concibe la vida sin equidad y eso es lo que intenta transmitir a los que le rodean y viven en su propio entorno.
Sorprende que aun siendo un film descaradamente dirigido a un público infantil no aparezca ningún personaje de carácter apócrifo, todos son humanos, tangibles, reales, esa parcela de fantasía parece reservada al búho y sobre todo a su particular ulular, que acaba por ahuecar las carnes del temible Bedanec, más por el desconocimiento real de su entorno y por su creencia en las leyendas que por lo que realmente implica dicho sonido o presencia, este es el arma fundamental del niño contra él, la sabiduría y el conocimiento del medio en el que se mueve.
Esta obra está dedicada a esta especie de Pulgarcito, le denomino así para que ustedes tengan una referencia más o menos conocida, el personaje es un Juan sin miedo, Kekec (Matija Barl) decide enfrentarse a Bedanec (Franc Presetnik) una especie de ogro pero humano a pesar de las advertencias de sus amigos los cuales le temen como si del propio diablo se tratara.
La obra supone un completo canto a la naturaleza y la armonía en la que esta podría vivir con el hombre si realmente así se lo propusieran los humanos, el protagonista si que logra ese estatus que le permite enfrentarse a cualquier cosa y que de alguna manera acaba reforzando sus propios principios de justicia e igualdad, Kekec no concibe la vida sin equidad y eso es lo que intenta transmitir a los que le rodean y viven en su propio entorno.
Sorprende que aun siendo un film descaradamente dirigido a un público infantil no aparezca ningún personaje de carácter apócrifo, todos son humanos, tangibles, reales, esa parcela de fantasía parece reservada al búho y sobre todo a su particular ulular, que acaba por ahuecar las carnes del temible Bedanec, más por el desconocimiento real de su entorno y por su creencia en las leyendas que por lo que realmente implica dicho sonido o presencia, este es el arma fundamental del niño contra él, la sabiduría y el conocimiento del medio en el que se mueve.
Por tanto supone un ejercicio curioso la visualización de este trabajo pero no sin mas anhelos, no se piensen que van a disfrutar en extremo ni que vana a acabar saltando del sillón en algún momento, ni siquiera soltar alguna sonrisa, ni lagrimilla, por cierto porque tanta manía en introducir canciones en todas las películas infantiles, aun así puedo decir por este caso que no es un fenómeno de ahora sino que viene de lejos.
TRONCHA
3 comentarios:
Gracias te deseo a vos lo mismo y te sigo desde hoy
Todo un descubrimiento.
Gracias por darla a conocer y un saludo.
Me sumo a las palabras anteriores en el tema de que este film es un descubrimiento para mí también. Parece una fábula fresca. Saludos!
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