"Spider" de David Cronemberg
You can read this text translated into english at: Spider
Otra oportunidad más para ir descubriendo el cine de David Cronenberg, es obvio decirlo pero cuanto más vemos el trabajo de alguien mejor le conocemos, e incluso en el futuro podremos aventurarnos a decir como va a reaccionar ante distintas situaciones. Incluso podemos especular con otros trabajos diciendo lo de típico de si Cronemberg la hubiera hecho, haría esto o aquello. Encuentro ciertos paralelismos con algunos aspectos del cine de otro David, por supuesto salvando las diferencias, se podría decir, que el cine de David Cronemberg es más tangible que el de David Lynch, por supuesto sin considerar uno superior al otro.
"Spider" es una locura, mejor dicho es la historia de una locura, por supuesto con su loco de turno, fantásticamente interpretado por Ralph Fiennes, lo que hace que llegado el momento acabemos dentro de la trama que es lo que realmente pretende el realizador. Esto es a veces es un problema porque de repente estamos tan embebidos en la historia que cuando ocurre algo inesperado, como es el final de la película, nos hace replantearnos todo lo anteriormente visto.
Es acertado el final abierto que nos plantea Cronemberg, porque no resulta tramposo y no ha intentado engañarnos, quizás hemos sido nosotros mismos los que nos hemos mentido. El resultado es que la lógica manda que al replantearte los hechos se haga en una dirección, pero habrá espectadores que les apetezca complicar sus conclusiones y esto también resulta lícito por su parte, porque la historia admite varias interpretaciones distintas a la más lógica.
En todo momento somos protagonistas de lo que ocurre, de los continuos flask backs con los que el propio Spider hace balance de su vida, el planteamiento de las escenas es similar al de un ring de boxeo.La pelea o escena principal se desarrolla en el centro del cuadrilátero y el protagonista está sentado en un rincón observando pero sin ser visto, idéntica posición a la que el director coloca al espectador en el otro rincón, siendo ambos testigos de como se desarrollan los hechos.
La textura y luminosidad del film me parecen idóneas, creando una atmósfera de grises que nos introducen en los bajos fondos de una ciudad industrial, que si les confeso la verdad no se si hacen referencia a ella durante la narración, pero realmente es lo menos interesante. Lo importante es que la mente de nuestro protagonista y por extensión la nuestra, se mueve entre la realidad y la locura constantemente, traspasando continuamente ambas fronteras sin que seamos capaces a veces de distinguir una de otra.
Podríamos hablar bastante más tiempo del film, divagando entre los traumas de Spider y la forma en la que afronta su vida y como lo hacen también los que están a su alrededor, como queda marcada su vida por el período de su infancia y la relevancia de sus padres en su formación como persona, pero es mejor que ustedes la vean y aprecien los detalles de la misma que no son pocos.
"Spider" es una locura, mejor dicho es la historia de una locura, por supuesto con su loco de turno, fantásticamente interpretado por Ralph Fiennes, lo que hace que llegado el momento acabemos dentro de la trama que es lo que realmente pretende el realizador. Esto es a veces es un problema porque de repente estamos tan embebidos en la historia que cuando ocurre algo inesperado, como es el final de la película, nos hace replantearnos todo lo anteriormente visto.
Es acertado el final abierto que nos plantea Cronemberg, porque no resulta tramposo y no ha intentado engañarnos, quizás hemos sido nosotros mismos los que nos hemos mentido. El resultado es que la lógica manda que al replantearte los hechos se haga en una dirección, pero habrá espectadores que les apetezca complicar sus conclusiones y esto también resulta lícito por su parte, porque la historia admite varias interpretaciones distintas a la más lógica.
En todo momento somos protagonistas de lo que ocurre, de los continuos flask backs con los que el propio Spider hace balance de su vida, el planteamiento de las escenas es similar al de un ring de boxeo.La pelea o escena principal se desarrolla en el centro del cuadrilátero y el protagonista está sentado en un rincón observando pero sin ser visto, idéntica posición a la que el director coloca al espectador en el otro rincón, siendo ambos testigos de como se desarrollan los hechos.
La textura y luminosidad del film me parecen idóneas, creando una atmósfera de grises que nos introducen en los bajos fondos de una ciudad industrial, que si les confeso la verdad no se si hacen referencia a ella durante la narración, pero realmente es lo menos interesante. Lo importante es que la mente de nuestro protagonista y por extensión la nuestra, se mueve entre la realidad y la locura constantemente, traspasando continuamente ambas fronteras sin que seamos capaces a veces de distinguir una de otra.
Podríamos hablar bastante más tiempo del film, divagando entre los traumas de Spider y la forma en la que afronta su vida y como lo hacen también los que están a su alrededor, como queda marcada su vida por el período de su infancia y la relevancia de sus padres en su formación como persona, pero es mejor que ustedes la vean y aprecien los detalles de la misma que no son pocos.
TRONCHA
2 comentarios:
Bienvenidos al sombrío mundo de la esquizofrenia, de la sensación de irrealidad y de la paranoia. Para mi, la mejor interpretación de Ralph Fiennes y una de las mejores películas de Cronemberg.
Hace un par de semanas acababa de leer Dublinesca de Vila – Matas donde el protagonista desgrana aspectos de esta película y los lleva su propia existencia. No la he visto, pero la buscaré.
Muy interesante tu blog. Lo enlazo al mio.
Publicar un comentario